miércoles, 2 de enero de 2013

Amanecer

No prometo pintar de estrellas tu cielo
ni ponerle anaranjados al sol.
Sería feliz si el susurro de mi voz
se entrelazara con la humedad de tu brisa.
La voz del mar y el infinito hondo
espantan el azabache de tu mirada.
No prometo despojarte los fantasmas.
Sería feliz si tus letras se mezclaran
con silvestres temblores de mi alma.
Si pudiera desabrochar tus pensamientos
para volverlos a trenzar con risas nuevas, 
como un amanecer.



domingo, 30 de diciembre de 2012

Anonimato


Ella respira forzada a través de la tela húmeda
sus ojos muy abiertos escuchan el silencio
aterrador silencio.
Ella respira y vomita sudores,
cinco o seis sudores aguantados en su piel,
pierde la cuenta, se abandona a su suerte.
Sus ojos aún impedidos escuchan carcajadas.
Sudores ajenos inmundos alcoholicos.
Desgarradores gritos venían de cerca
aterradores gritos.
Terroristas de la inocencia:
Ella respira.
Torturadores de sueños:
Ella respira y vomita una palabra:
libérame, agonía.
Ella respira el olor de la muerte.
Violadores de almas:
¡Ella respira!
Y algún día, alguien pintará su mundo
con perfumes de seda.
Y guardará su aroma.

Gota de lluvia



Gota de lluvia

Si el universo tiene la insolencia de confabular con los planetas su existencia,
Si el método implacable del agua puede surcar la piedra,
Si el desierto puede sobrevivir al viento,
Si los ausentes pueden seguir cantando,
Si el fuego puede someterse al hombre,
Incluso si la humanidad puede sobrevivir a su miseria,
Entonces vos, podrías ser la gota de lluvia que pacifique mi vacío.

.



viernes, 28 de diciembre de 2012

Sinfonías


Sinfonías

Recuerdos de los patios de mi infancia
La higuera inmensa para mis pequeños ojos de edad cortita
El dulce aroma de los jazmines
El sabor del mate cocido
Mi abuela en los fogones y mi hermano que llora
Mil espinas de los rosales confabulan sinfonías que estallan en mi pecho
Y el enigma de tu dolor que atraviesa la eternidad del tiempo
Mudo pero nunca ausente, mortificando mi cuerpo
Sinfonías de formas, colores y tamaños dispares
Como un rompecabezas imposible
Sinfonías insomnes que anuncian despedidas
Y al final, un carozo de un durazno compartido
Me dice que hay que empezar de nuevo




Testimonio


Testimonio

Terremotos, huracanes, maremotos
Guerras ni guerrillas
Fuerzas oscuras, malignas
Catástofres nucleares
Holocaustos, cóleras
Mi propia muerte
Nada podrá tentarme
A salir de este infierno
De sentirme cautiva en tu mirada

Gritos mudos

Gritos mudos


Los silencios hacen alianzas con las ausencias
tu voz abunda muda
tu sombra desaparece cruda
te hundes en espirales
falsificas luces de amanecer
y tu mirada se hace cristales
Me despedazas para renacer.                                                                             











No has muerto




La sangre corría invisible por las venas enfermas de la ciudad agonizante,
sus raíces se aferraban con sus garritas ingenuas, desafortunadas.
Alguna ramita se dejaba ver tímida entre las piedras yertas, pobrecitas!
¡Cruel destino aguardaba por ellas!
Los fantasmas ciegos ahogaban los gritos desde el mar.
No has muerto, contra todo pronóstico, no has muerto.